El pasado 3 y 4 de mayo, en el centro universitario Sagrada Familia se celebró el emocionante III Torneo Nacional Universitario SAFA. Desde la inauguración hasta la gran final en el emblemático Teatro Ideal Cinema, el evento destacó por su calidad de debate y el espíritu competitivo de los participantes.
Se enfrentaron diez equipos de Universidades de toda España, empezando por Úbeda, con SAFA, pasando por sus vecinos Jienenses con ADUJA, por Cádiz de la mano de Innova, ascendiendo hasta Madrid con UFV o CMU Isabel de España hasta nuestros más lejanos compañeros Bilbainos con Deusto, además de Dicentis, Cánovas fundación, Loyola y CDP:virgen de la cabeza.
La pregunta central del torneo, «¿Está el sistema educativo preparado ante la irrupción de la inteligencia artificial?» sirvió como base para intensos debates durante las cinco rondas clasificatorias de 45 minutos que se disputaron bajo el sistema de examen cruzado que suma a la clásica estructura de introductor, primer y segundo refutador y conclusor, dos minutos de intensas preguntas. Tras esto, los participantes tuvieron la oportunidad de recuperar fuerzas en un espléndido Coffe Break, que para algunos, no fue más que otra ronda del debate, esta vez marcada por la pregunta, ¿De dónde son los ochíos?
Tras la comida en el centro universitario y la foto grupal del torneo, todos los presentes se reunieron en la gran escalera del centro, donde Marina Perez y Ramón Salamanca anunciaron los equipos clasificados. La gran final enfrentó al CMU Isabel de España contra Dicentis, en un duelo que mantuvo en vilo a los espectadores hasta el último momento. Al final, CMU Isabel de España se alzó con la victoria, demostrando su dominio en el arte del debate.
El equipo campeón del torneo recibió como premio un botijo artesanal de la reconocida alfarería «Paco Tito», junto con un diploma honorífico. Los subcampeones, al igual que los ganadores, fueron galardonados con un botijo de menor tamaño y un diploma. No obstante, los premios no solo reconocieron el éxito del equipo ganador, sino también la excelencia individual. El mejor orador, Miguel Barrero, destacó por su elocuencia y habilidad para persuadir a la audiencia y fue premiado con un botijo más pequeño y una bolsa de los célebres ochíos.
Adicionalmente, se anunció el equipo ideal, reconociendo al mejor introductor, primer y segundo refutador, y conclusión. Se añadió un nuevo premio, el premio al mejor nombre de equipo, otorgado a «aceitUJA», una denominación sumamente original, representativa y acertada.
Y para poner el broche de oro y distinción a este entrañable torneo, tuvo lugar una visita guiada a la sacra capilla del Salvador, donde José Miguel Gámez, docente del centro y concejal del pueblo dió una visita guiada en el monumento, la cual maravilló a los presentes.
Además de la competición en sí, el torneo ofreció momentos memorables fuera del escenario. Desde el mural de fotografías instantáneas hasta una fiesta en «La Cultural» el sábado noche, donde los participantes, jueces y organizadores celebraron el éxito del torneo hasta altas horas de la madrugada.
Esto es todo por hoy. Volvemos pronto, otra semana más, aquí, en ElDebatiente, la casa común del debate español.
