Buenas tardes Ignacio! Como nos gusta en ElDebatiente empezar… Cuéntanos tus inicios en debate.
Mi primera experiencia con el debate se dio en primero de carrera. Al ser de fuera de Madrid, vivía en el Colegio Mayor Elías Ahúja, con el que he debatido la inmensa mayoría de los torneos.
Dentro del colegio existen múltiples actividades y deportes en los que se puede participar. Pues bien, uno de mis mejores amigos de la infancia estaba en el colegio conmigo, y cuando uno de los veteranos de debate le preguntó si se quería unir al club, me “vendió” a mi en su lugar, porque yo “discutía muy bien y me gustaba mucho hacerlo”. Ahora, gracias a esa recomendación no pedida, me metí en el club y empecé haciendo académico, en el torneo del Isabel de España de 2016.
Desde luego, no eres el primero ni serás el último que entra por accidente en el mundillo. Sabemos de primera mano que eres un veterano de Madrid. ¿En cuántos torneos has podido estar?
Realmente mis 2 primeros años de carrera fueron muy discretos en cuanto a torneos, con sólo un par al año. En 2018/19 es cuando empiezo a debatir con Javier Sánchez Villegas (aka Bisa) y entonces ya nos ponemos en serio con los torneos, yendo a prácticamente todos los que podemos, incluyendo un open en Londres y otro en Rotterdam y el mundial en Perú.
En 2019/20, pese a que llevábamos muy buena racha ganando torneos, todos sabemos lo que pasó en marzo de 2020, y ahí se acabó mi paso como debatiente por el mundo del debate. Ahora me dedico a dar clases en el Ahúja y el Mara y entonces acudo a los torneos como juez/formador.
Nos gustaría profundizar un poco más y que nos contases cuál ha sido tu mejor y tu peor experiencia en un torneo.
Mi mejor experiencia, sin duda, fue conocer a mi actual novia, Ana, en el mundial de Perú 2019. Cuando la gente dice que el debate les ha dado muchas cosas más que el mero conocimiento académico, no puedo estar más de acuerdo. Estoy eternamente agradecido al debate por permitirme conocer a Ana y vivir todas las cosas increíbles que hemos vivido.
Respecto a mi peor experiencia, creo que fue salir eliminado en CMUDE en octavos. Fue un debate en el que los dos panelistas trollearon al juez principal, y nos quedamos fuera por no traer un contrafáctico desde primer gobierno en una moción de lamentar (sí, eso que se ha puesto de moda ahora, lo experimenté de primera mano en CMUDE, solo que ahí todavía no existía la norma y a mi me eliminaron en base a ella).
Fue un momento tremendamente frustrante y lo sentí como una injusticia respecto a todo el trabajo que habíamos hecho durante el año. Pese a todo, el CMUDE Perú siempre tendrá un lugar especial en mi corazón.
Si tuvieras que escoger una modalidad de debate para siempre y olvidarte de la otra, ¿cuál escogerías? ¿Académico o BP?
Yo soy un chico BP al 100%. Pese a todo, creo que es una pena que el académico se esté perdiendo. Yo empecé haciendo académico y creo que aporta ciertas cosas muy útiles a los debatientes que el BP no puede. Preferiría un mundo donde ambos convivan en armonía y haya la posibilidad de participar en ambos. Un académico al año no hace daño.
¡Nos encanta esta pregunta! ¿Cuál ha sido la moción que más cómodo te ha hecho debatir?
Hay muchas mociones que me han gustado debatir y me sería imposible escoger una. Si tuviera que escoger, elegiría la moción de mi primera final, en Salamanca: “EC prefiere un mundo en el que siempre se diga la verdad”.
Me acuerdo que era la persona menos veterana del debate y que de hecho me definí a mi mismo como “novatillo indefenso” para probar un argumento. Fue la primera vez que sentí que estaba haciendo un buen discurso y la primera vez que estaba tranquilo y pude añadir un par de bromas entre argumentos, así que le guardo un cariño especial.
Pues, siguiendo con mociones a las que le tengas cariño, ahora vamos a hacer un ejercicio. Si tuvieras que decidir ahora mismo una moción para un torneo. ¿Cuál sería y por qué? Aquí te dejamos que sea algo relacionado con una película, una serie, tu vida personal, etc. ¡Libre elección!
Esto tiene truco, ya que actualmente formo parte del equipo de adjudicación del Campeonato de España y justo en estos momentos estamos trabajando para tener el mejor torneo posible en cuanto a mociones. Así que para poder descubrir qué moción me gustaría poner en un torneo tendréis que esperar al 14 de abril y venir al Campeonato para verla.
Sin embargo, como bonus, os diré que siempre me encantó la iniciativa del Friki BP que se hacía en Comillas, y que me habría encantado debatir algo sobre The Walking Dead, al estilo de “Alguien muy importante para ti está en peligro y rodeado por zombis, EC se jugaría la vida por intentar salvarle”.
Bueno, no ha sido posible desvelar una del 14 de abril, pero nos llevamos el rescate de una buena moción pasada.
No siempre nos toca debatir lo que uno piensa. A veces, está totalmente en contra de nuestras creencias. ¿Cómo interiorizas un papel que no te corresponde? ¿Qué pautas sigues?
Nunca me ha costado esto. De hecho, me gusta bastante discutir con mis amigos haciendo de abogado del diablo, y defiendo una postura que no necesariamente es la mía. No sé por qué siempre me ha parecido interesante ponerme en la piel del otro y pensar desde esa perspectiva. En los académicos, yo era de los que cambiaban del A Favor al En Contra con un chasquido de dedos, supongo que algunas personas tienen más facilidad para esto que otras.
Siempre que entramos nuevos en un mundillo hay cosas que desconocemos y que vamos aprendiendo con los años. Si tuvieras que darle unas pautas claves a alguien que acaba de empezar en debate, ¿cuáles serían?
Que aprovechen. Debate te abre muchísimas posibilidades que la mayoría de universitarios no puede tener. Las fiestas y los viajes son dos de las cosas que más han hecho que disfrute la actividad con mis amigos, y creo que es un lujo que podamos hacer todo eso con la “excusa” de que es una actividad académica.
Así que a toda persona novata le diría que ni se preocupe por los resultados, que todo llega, pero que aproveche para ir a todas las fiestas y torneos lejos de donde viva, que esos no vuelven.
Y ya con la misma rutina, define tus años de debate y cómo te ves en un futuro gracias a la oratoria.
Mis años de debate los definiría en base a dos pilares. Por una lado, mis amistades, viajes, comidazas, risas, preparaciones hasta las 3 de la mañana y rondas eliminatorias de resaca. En el fondo, lo bien que lo he pasado. El segundo pilar con el que definiría debate sería mi relación con Ana, que nunca podría haber tenido sin CMUDE Perú, y que es lo mejor que me ha pasado en la vida. Espero en un futuro poder seguir dando clases a alumnos que se interesen por el debate, y quien sabe, puede que algún día acabe utilizando mis habilidades de oratoria para, por ejemplo, ser profesor.
Hoy no tenemos tiempo para más. ¡Muchísimas gracias Ignacio por tu tiempo y esperamos verte pronto por aquí de nuevo!
A los demás, nos vemos la semana que viene aquí, en ElDebatiente, la casa común del debate en español.