Nuestro circuito de debate nacional pasa por un proceso de regeneración, en el que quienes solían ocupar los primeros puestos han empezado a dejar paso a las nuevas generaciones. Es por ello por lo que ahora más que nunca es necesario buscar una integración para nuestros nuevos compañeros, y mi duda sobre si lo estamos haciendo correctamente es lo que ha motivado este artículo.
Si buscamos responder de manera afirmativa a esta pregunta, probablemente debamos fijarnos en los múltiples mecanismos que hemos integrado a nuestros torneos para dar visibilidad a los novatos. Desde que se implementó por primera vez la categoría de novatos en un torneo BP en España (con su correspondiente final y top de oradores), hemos visto como una gran cantidad de torneos cuenta con su propia categoría de novatos (UAM, ADUSAL, Compostela, Comunícate, entre otros); así como torneos que se dedican específicamente a los novatos (BP Aquinas-Roncalli). Pero también, cómo ha surgido la categoría PRO-AM (un debatiente experimentado con un debatiente con menor experiencia), bien como complemento a la categoría Open (como sucede en el BP Elías Ahúja), bien para dar forma a un torneo entero (como ocurrió el pasado abril con el BP URJCEU). Incluso programas destinados a su formación, como el realizado en el IV BP URJC.
No cabe duda, de que estos mecanismos han sido de gran utilidad para nuestros novatos, dado que antes siempre existía el obstáculo de tener que competir con debatientes mucho más experimentados y de mayor nivel, para acceder a los tan ansiados breaks. De esta manera, el incentivo para acudir a torneos y tratar de mejorar y competir al máximo nivel, se incrementa desde la perspectiva de un novato. Claramente todos queremos ganar, pero también sentirnos realizados con lo que hacemos y que nuestros compañeros nos reconozcan nuestro esfuerzo, y estos mecanismos nos permiten destacar y alcanzar dichas metas. Su formación también se ve favorecida, dándoles una oportunidad de afrontar una ciega con posibilidad de break, o una final en la que saber lidiar con los nervios y la presión de tener que ganar a otros debatientes que no tienen un nivel diferencial.
Hemos conseguido grandes avances, sin embargo, todavía muchos torneos carecen de estas disciplinas o dinámicas, por lo que los avances no aplican al conjunto del circuito.
De cara a dar una respuesta negativa, creo que no sólo debemos tener en cuenta el aspecto de los torneos y las categorías específicas de estos. Al fin y al cabo, para poder integrarte no sólo necesitas tener tu espacio competitivo, sino también que se te valore adecuadamente. Necesitas que se trabaje para formarte y, sobre todo, que se haga un esfuerzo para incluirte dentro del circuito.
Sobre la toma en cuenta de los novatos, creo que en muchas ocasiones no les tenemos en cuenta como se debería, e infravaloramos sus capacidades en el corto plazo simplemente por ser menos experimentados. Actitudes como creer que les ganaremos por su falta de experiencia, no estar satisfecho si tengo que juzgar una sala de novatos por pensar que será un peor debate, no entrar a ver la final de novatos, pero sí la semifinal de open, o poner a los mejores jueces en salas a las que tienen complicado acceder, son ejemplos de lo que digo. Así, los novatos suelen recibir feedbacks no tan buenos, y se sienten infravalorados en los debates. Estos aspectos pueden suponer un freno a su motivación de cara a acudir a torneos y a competir, y esto es algo que puede determinar su futuro dentro del circuito.
Con respecto a la formación, no creo que nadie se niegue a dar consejos o feedback extra a una pareja novata, sin embargo, esto no es una práctica usual en los torneos. Principalmente porque a veces les cuesta acercarse a alguien que no conocen para pedir ayuda. Pero es algo sencillo para los jueces, y que supone una buena forma de hacerles sentir valorados y ayudarles a mejorar.
Algo similar sucede con las parejas PRO-AM, en las cuales solemos imponer un espíritu competitivo que no beneficia a nuestras parejas. Son numerosas las ocasiones en las que los “AM” sienten demasiada presión, ven como no se valoran lo suficiente sus ideas, o se ven relegados a posturas “menos necesarias” para ganar el debate. En estas situaciones se debería primar por completo la formación de los novatos, y para ello, a veces es necesario abandonar la faceta competitiva, y tratar de hacerles sentir cómodos y valorados.
El ámbito de la inclusión personal es particularmente importante, debido a que determina que tengas personas cercanas en un torneo, con quienes sentirte cómodo y seguro. Normalmente no somos conscientes de esto, porque dentro del circuito cada uno tiene su propio círculo social constituido, y es complicado percatarse de que alguien está solo en el pasillo después de un debate difícil, no va a la previa de la fiesta, o se queda algo aislado durante los social. Sin embargo, es nuestra responsabilidad el tratar de empatizar con ellos e integrarles, para que puedan compartir ese círculo que nosotros tanto apreciamos, y que nos sirve de apoyo durante los torneos. Creo que es más sencillo el dar continuidad a una actividad, cuando tenemos personas que nos apoyan y confían en nuestras capacidades. Especialmente con los novatos de nuestra propia institución, los cuales, además, buscan role models en los que inspirarse.
Para cerrar con esta parte, quiero dejar claro que esto son solo una exposición de sucesos que he visto o experimentado en debate, pero no creo que sean algo generalizado, ya que existen personas e instituciones que contradicen por completo lo aquí expuesto. Asimismo, creo que todos estos aspectos se suceden de manera involuntaria en el circuito, muchas veces porque no somos conscientes de ellos o porque no reflexionamos a fondo. Por ello, este texto no es una crítica, sino una forma de visibilizar ciertas situaciones.
Mi conclusión es que, pese a que cada vez hacemos más esfuerzos (y esto es algo de alabar), nuestros esfuerzos siempre están limitados a determinadas parcelas del circuito. Esto dificulta la integración al completo, porque para ser parte del circuito probablemente necesites también a gente que te tenga en cuenta, te ayude, y entienda que se necesita tiempo para evolucionar. Creo que estos aspectos deberían preocuparnos más a futuro, para que así nuestros novatos puedan estar más satisfechos y felices en el torneo
Espero que el contenido de este artículo, sea compartido o no por vosotros, sirva para llamar a la reflexión sobre esta cuestión.
Así pues, el debate está servido.